En 1798 cuando los estragos de la PESTE diezmaba a la población, en la parroquia de Santa María de la Régoa, que estaba en la actual plaza de España de Monforte de Lemos, el Cura Vicario de ésta exponía que el Ayuntamiento de la villa de Monforte deseando exterminar de algún modo la contagiosa peste imploraba al prodigioso santo San Roque con un Novenario y concluyendo con una Procesión general por los términos de la parroquia.
El texto está recogido en el Libro de Fábrica (III) de la parroquia de Sta. María de la Régoa,( 1729-1804), Arciprestazgo de Monforte de Lemos. dice así:
Don Manuel Viana, Cura Vicario de la parroquia de la Régoa, en la villa de Monforte de Lemos, con el más profundo respecto y reverente sumisión expone a V.S.I. que el Ayuntamiento de esta villa deseando exterminar de algún modo la contagiosa peste que por todos lados nos amenaza poniéndonos en el más apuro y consternación determinio, previo mi consentimiento poner en esta Parroquia al prodigioso Santo San Roque, por estilo de Novenario, concluyendo con una Procesión general por los términos de la misma; y por un efecto de mayor culto, me suplicó que expusiese en la Misa del último día a su Majestad divina de manifiesto en que nos conviene por no malograr la gracia de V.S.I. hasta que en este particular precediese su asenso, lo que hago presente como propio de mi obligación para que V.S. I. se sirva acordar en este punto, loque fuere de su mayor agrado, otorgándome favorablemente esto suplica, por ser, particular la causa que la prepara. (215r)